Las vitaminas y minerales son nutrientes esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano y su carencia puede tener graves consecuencias para la salud. Una dieta equilibrada y variada es crucial para obtener los nutrientes necesarios, pero muchas veces resulta difícil alcanzar los requerimientos diarios sólo a través de la alimentación y es necesario recurrir a complementos vitamínicos y minerales.

En este artículo descubrirás cómo las vitaminas y minerales pueden mejorar tu salud y qué alimentos los contienen.

Vitamina A, la vitamina de la vista

La vitamina A es esencial para la salud de los ojos y para el sistema inmunológico. También es importante para la piel y para mantener sano el revestimiento de los órganos internos. La deficiencia de vitamina A puede aumentar el riesgo de infecciones, ceguera nocturna y problemas de crecimiento.

Los alimentos ricos en vitamina A incluyen productos de origen animal como la carne, el hígado y la leche, pero también se encuentra en frutas y verduras de color naranja o amarillo como la zanahoria, el mango y la calabaza.

Vitamina C, la vitamina del sistema inmunológico

La vitamina C es conocida por su papel en la prevención del resfriado común, pero también es importante para la salud de la piel y las encías. Además, tiene un efecto antioxidante que puede proteger al cuerpo de los daños causados por los radicales libres y reducir el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardíacas.

Los alimentos más ricos en vitamina C son las frutas cítricas como la naranja, el limón y la toronja, pero también se encuentra en las bayas, el kiwi y las verduras de hojas verdes como el brócoli y la espinaca.

Vitamina D, la vitamina de los huesos

La vitamina D es importante para la absorción del calcio y el mantenimiento de huesos fuertes. También juega un papel en el sistema inmunológico y la reducción del riesgo de enfermedades autoinmunitarias. La deficiencia de vitamina D puede aumentar el riesgo de osteoporosis, diabetes y enfermedades cardíacas.

La vitamina D se encuentra en pocos alimentos, pero algunos de los principales son los pescados grasos como el salmón y las sardinas, los huevos y los lácteos fortificados.

Hierro, el mineral de la energía

El hierro es necesario para la producción de hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno en la sangre. La deficiencia de hierro puede causar anemia, fatiga y debilidad muscular.

El hierro se encuentra en alimentos de origen animal como la carne roja, el pollo y el pescado, pero también se encuentra en las legumbres, las espinacas y los cereales fortificados.

Calcio, el mineral de los huesos

El calcio es necesario para la formación y el mantenimiento de huesos y dientes fuertes. También juega un papel en la contracción muscular y la regulación del ritmo cardíaco. La deficiencia de calcio puede aumentar el riesgo de osteoporosis y fracturas.

Los alimentos ricos en calcio incluyen lácteos como la leche, el queso y el yogur, pero también se encuentra en las verduras de hojas verdes como la col rizada y el brócoli.

Puntos importantes a considerar

Es importante recordar que los complementos vitamínicos y minerales no deben utilizarse como sustitutos de una dieta equilibrada y variada. Además, un exceso de algunos nutrientes puede ser perjudicial para la salud y es necesario seguir las recomendaciones de ingesta diaria establecidas.

Por otro lado, es necesario tener en cuenta que algunos grupos de personas como mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, personas mayores y personas con ciertas enfermedades pueden necesitar de cantidades mayores de algunos nutrientes y es recomendable consultar con un profesional de la salud.

Conclusión

En resumen, las vitaminas y minerales son nutrientes esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo y su carencia puede tener graves consecuencias para la salud. Es importante asegurarse de obtener los nutrientes necesarios a través de una dieta equilibrada y variada y, en caso de ser necesario, recurrir a complementos vitamínicos y minerales bajo supervisión de un profesional de la salud. Además, es importante recordar que un exceso de algunos nutrientes puede ser perjudicial para la salud y seguir las recomendaciones de ingesta diaria establecidas.

Valeria Catillo